En preparación para la fiesta de San José, el 19 de marzo de 2025, te invitamos a tomarte el tiempo para orar e invocarlo.
Buen San José, difunde la unidad sobre cada uno de nosotros para que, con el mismo corazón y la misma misión, las Oblatas, los Voluntarios de Dios, los amigos y cada bautizado se sientan responsables de crear unidad en su ambiente para que reine la armonía en el mundo.
Confiémosle nuestro país en este momento difícil para todos, él que tanto ha esperado en su camino de fe.
La señal de la cruz: En el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Amén
![]() San José, acompaña a los que están al servicio de la Iglesia para que escuchen las directrices del Papa Francisco en este Año Jubilar. Vela también sobre nuestra Iglesia, el cuerpo de Cristo, en sus luchas y pruebas. Protege a nuestra Iglesia en su vocación. Dale la fuerza para superar los desafíos del mundo de hoy, e inspira a sus miembros con el coraje de seguir a Cristo con un corazón puro y sincero. ¡Oh buen San José, ruega por nosotros, escúchanos! |
![]() Buen San José, tú sabes cuántas familias pasan por dificultades de todo tipo, ayúdanos a llevarlas en la oración. En este día de la novena, tomemos conciencia de nuestra gran familia eclesial y ejerzamos una cualidad de apoyo siendo un ser de servicio a través de la oración, de una llamada telefónica, de una carta, de una visita... ¡Oh buen San José, ruega por nosotros, escúchanos! |
![]() Buen San José, abre nuestro corazón a la angustia de los enfermos. Seamos compasivos con las personas que nos rodean siendo amables. Y si, sin embargo, nos sentimos incómodos, seamos serenos en la aceptación sin quejarnos innecesariamente, viviendo en perseverancia. ¡Oh buen San José, ruega por nosotros, escúchanos! |
![]() Buen San José, has conocido la fatiga del trabajo de carpintero, inspira confianza a las personas que luchan por encontrar un trabajo para alimentar adecuadamente a sus familias y desarrollarse personalmente. Admiremos su tenacidad en su búsqueda en lugar de criticarlos por pensar que no se están esforzando lo suficiente. Seamos solidarios también con quienes luchan por unas condiciones seguras en el trabajo. ¡Oh buen San José, ruega por nosotros, escúchanos! |
![]() Buen San José, sabes que muchas personas tienen discapacitades físicas, mentales o morales. No siempre se sienten aceptados y es un gran sufrimiento. Estemos presentes desde el corazón en esta angustia para descubrir la riqueza de la presencia de Dios en estas personas y decirles nuestro descubrimiento de lo positivo en ellas. ¡Oh buen San José, ruega por nosotros, escúchanos! |
![]() San José, rezamos especialmente por las personas que están en el centro de las negociaciones para mejorar las condiciones de trabajo. Abra los corazones para que haya puntos de acuerdo. No se olvide de las parejas, de los jóvenes en la escuela, de los que trabajan en nuestro sistema de salud y que en el mundo reinen el respeto, la justicia y la búsqueda de soluciones pacíficas. ¡Oh buen San José, ruega por nosotros, escúchanos! |
![]() Buen San José, hombre de paz, has colaborado en la obra de Dios en tu entorno sembrando la paz. También nosotros, como constructores de paz, cada uno en nuestro propio círculo, debemos estar atentos a discernir lo que puede construir la paz. Nuestro fundador, el Padre Louis-Marie Parent, o.m.i., nos dice que la paz es un fruto del Espíritu Santo, la más gratificante de las bienaventuranzas. Contigo, san José, pongámoslo en práctica a medida que pasan los días. ¡Oh buen San José, ruega por nosotros, escúchanos! |
![]() Hoy, San José, te imploramos con confianza y tenacidad por todas las necesidades del mundo, que son muchas. Pensamos en la guerra que obliga a muchas personas a abandonar su país. Las familias a menudo se separan por la partida de sus seres queridos. Llevemos también en la oración la hambruna que están viviendo algunos países. Estemos abiertos a un compartir que libere a la persona del egoísmo y la abra al soplo del Evangelio. ¡Oh buen San José, ruega por nosotros, escúchanos! |
![]() Buen San José, gracias por guiarnos durante esta novena. Hoy es tu día de fiesta. Que intercedas con discreción, firmeza y amor por los que te han sido confiados. Forma nuestros corazones y mantenlos cerca de la voluntad de Dios, ilumina nuestras mentes para que podamos poner nuestra esperanza en el Señor, tal como lo has hecho en el momento presente. Gloria al Padre, al Hijo y al Espíritu Santo por los siglos de los siglos. Amén |
Réjeanne Allard, Drummondville |