Testimonios
La iglesia de Vettithuruthu, en este momento bajo la dirección de la Iglesia Metropolitana de Changanacherry, conoció un período de transformación entre 1974 y 1977, cuando su vicario auxiliar, el Padre George Alencherry, fue nombrado sacerdote de la parroquia. Al reconocer que era necesario mejorar rápidamente las condiciones socioeconómicas de la gente, sobre todo la de las mujeres desempleadas, puso en marcha un taller de confección de ropa a fin de asegurarles una formación profesional. Para dirigir esta misión, nombró a la Sra. Mariamma Mathew, miembro del Instituto de las Oblatas Misioneras de María Inmaculada, confiándole la administración.
La Sra. Mariamma Mathew asumió esta responsabilidad con una entrega y una sinceridad excepcionales y devino una fuente de progreso y esperanza para la parroquia. Su compromiso desinteresado y su liderazgo inspirante influenciaron profundamente la comunidad, particularmente la juventud, cambiando sus formas de ver y guiando sus acciones para las futuras generaciones.
En una región que estaba desfavorecida en los planos educacional y socioeconómico, las iniciativas espirituales y pragmáticas de la Sra. Mariamma Mathew se convirtieron en modelos que cambiaron las maneras de hacer y dieron esperanzas. Sus opiniones y sus ideas eran muy estimadas y se buscaban sus consejos sobre diferentes temas que afectan los asuntos regionales, sociales o familiares. Supo arbitrar los conflictos con competencia, promover la paz y la armonía y de esta manera evitó la discordia y la división en numerosas familias. Incluso en el día de hoy, algunas personas de los comienzos mantienen contacto con ella testimoniando así el impacto duradero que ella tuvo en la región.
Una de sus contribuciones más notable fue dirigir las gestiones emprendidas con vista al establecimiento de una parroquia en Vettithuruthu, un éxito que constituye un momento clave en la historia local. Cuando el consejo parroquial de la iglesia metropolitana de Changanacherry decide demoler la iglesia Kavalikkara, porque estaba en ruinas, los fieles, llevados por el reverendo hermano George Alencherry, pidieron permiso para proceder a la demolición. La Sra. Mariamma Mathew aprovecha entonces la ocasión para convertir estas ruinas en un espacio funcional. Su sueño se hace realidad cuando la dirección de servicios sociales de Changanacherry abre un taller para confeccionar ropa que permite así a mujeres jóvenes y menos jóvenes ganar la vida, Gracias a su apoyo inquebrantable y a sus consejos prudentes, la Sra. Mariamma Mathew aseguró el desarrollo y el bienestar de la gente. Su vida y su trabajo ofrecen un modelo ejemplar de liderazgo, de compasión y de tenacidad.
Al rendirle homenaje por su herencia, oramos a Dios para que le dé la fuerza de sobrepasar las dificultades de la vejez y procurarle la comodidad, la paz y la alegría que merece ampliamente.
Sra. Mariamma Mathew, OMMI
KS Antony Karimattom & Thomaskutty P.K. Puthenpurayil
Artículo publicado en la revista de la Iglesia metropolitana, Shepherd,
en septiembre 2024.