En el Congreso Internacional de los Voluntarios de Dios, desarrollado el 16 y 17 de julio del 2022, contamos con la participación de las Oblatas Misioneras de María Inmaculada y Voluntarios de Dios de diferentes partes del mundo. En el primer día fueron nuestras queridas Oblatas como celosas veladoras del sentido de la espiritualidad de las 5 actitudes de vida y de la caridad de Cristo, quienes nos revivieron como fue conocer y convivir con el fundador Padre Louis-Marie Parent y profundizaron sobre cada una de las 5 actitudes de vida.
Simone Huneault inició el congreso, agradeciendo a Dios por el don haber contado con la presencia del fundador el Padre Louis-Marie Parent, sarmiento muy especial de la viña del Señor y por haberlo llamado a proclamar la Caridad de Cristo, en todo momento y en todo lugar, mediante la vivencia de las 5 actitudes de vida y los actos de amor hacia los demás.
Pierrette Fortin, nos presentó la figura del Padre Louis-Marie Parent, destacando que fue un hombre de fe y de mucha cercanía a los demás, dotado de un celo apostólico notable y de un don extraordinario de la palabra.
Réjeanne Allard, nos habló sobre la primera actitud de vida: Presencia de Dios en el tiempo presente, resaltando que esta Presencia se hace notable en todo momento y lugar de la creación, y por ello, debemos agradecer de manera permanente la obra creadora de Dios.
Lina Lagacé reflexionó sobre la actitud de vida referida a la Ausencia de Crítica destructiva de manera interior y exterior, recordando que debemos de ver al prójimo con ojos del corazón, quitando la crítica negativa, nos invitó a sacar de nuestro corazón lo que impide que el amor se establezca en nosotros, para tener una mirada positiva, de amor y de compasión por todos.
Aline Morency, reflexionó sobre la actitud Ausencia de Queja Inútil interior y exterior, actitud que como las anteriores es un don de Dios, nos señaló que la vivencia de esta actitud nos permite desarrollar una miranda humilde y comprensiva hacia los demás y por consecuencia nos ayuda a cumplir de manera efectiva el mandamiento del amor: “Amar a Dios y al prójimo como a ti mismo”.
María Elena Perdomo reflexionó sobre la actitud de Ser de servicio, señalándonos la necesidad de la humanidad de servir. Nos recordó también que el Padre Parent decía, recordando las palabras de Cristo, que cada vez que alguien ofrece servicio a otro es a Dios a quien sirve.
Rose Mathieu reflexionó sobre la actitud de Artesanos de paz, señalando que la paz es el don de Dios, es el fruto maduro que produce el amor. En este sentido, nos recordó que la paz es la vida de Dios que se incorpora en el ser de la persona.
Al final del día, la Oblata Flor Acuña cerró con la reflexión sobre la necesidad de vivir la Presencia de Dios en todo momento y más aún momentos de debilidad, donde fácilmente nos vienen las dudas, los miedos y los cansancios, y es allí donde necesitamos vivir con más fuerza la presencia de Dios.
No cabe duda que el papel activo de cada una de las Oblatas que han acompañado y siguen acompañado los grupos de los Voluntarios de Dios en el corazón del mundo, ha dejado una huella invaluable y un germen de amor a nuestra espiritualidad centrada en el Presencia de Dios y la caridad de Cristo.
Esther Acuña Rios
Responsable de los Voluntarios de Dios