¡Al fin! Ya llega la primavera tan esperada que nos ayudará a olvidar este período pasado, agitado y vivo en emoción. Para algunos, este tiempo quedará como un recuerdo penoso que frenaba su empuje de vida.

Podríamos preguntarnos si esta bella primavera que se instala será bastante fuerte para borrar los momentos malos.

¿Por qué no tomar esta estación como un tiempo de buena terapia e interpelación? ¿La primavera en sí no es un tiempo de renovación? ¿Dama naturaleza no se reviste con sus bellos vestidos de verduras, dejando sus yemas estallar de vida, dándonos de nuevo el empuje de nuestros lindos jardines, rodeándonos de bellos colores que nos impregnan de un sentimiento de belleza, alegría y amor? ¿Porque no dejarnos sanar por la creación?

La renovación de la naturaleza nos invita a una transformación. Dejemos al Espíritu Santo realizar su obra en nosotros a lo largo de los próximos meses del año.

Louise F, Voluntaria de Dios
Marzo 2021