Que no quería vivir en un grupo con horario planificado de antemano, vestir un hábito y seguir reglamentos.
Cuando conocí el Instituto Secular de las Oblatas, comprendí que podía vivir mi compromiso de seguir a Jesús y continuar a la vez realizándome en mi medio con mi profesión, con mi familia y mis amigos. Lo que me hizo escoger el Instituto de las Oblatas era el objetivo formulado en ese momento: Vivir y testimoniar la Caridad de Cristo. El llamado a un Amor universal siempre fue fuerte en mí. El aspecto secular me convenía, ¡así que me comprometí y no me arrepiento!
Denise D.