2- Ciertas opiniones sobre la felicidad.
La felicidad no es el premio gordo de una lotería, tampoco la recompensa de una vida dura, no es algo que se gane haciendo esfuerzos, no es algo que me corresponde por razón de mi inteligencia y el despliegue de mis energías.
La felicidad no viene de los demás, viene de sí misma. Esta, en sí, supone una cierta búsqueda, una atención continua. La felicidad está en el fondo de mi ser, así como mi corazón está en mi caja torácica, como la sangre en mis venas, como mis pensamientos
en mi inteligencia, como mis energías en mi ser. La felicidad está en mí, si no pienso así, otras ideas fuertes drenarán mis energías a otro lugar.
La felicidad no viene de los demás, no es una lluvia que me cae en la cabeza, no es una libreta de banco, un nuevo carro, un abrigo de piel, una salud espléndida, una popularidad codiciable.
Pero es un estado de espíritu que me despierta a recoger en mi camino ruta miles de pequeñas alegrías, la sonrisa de un niño, la mirada benevolente y fraternal de una persona importante, una buena palabra donde sentimos que juega una carta de corazón.
Debo tomar conciencia de que mi estado de espíritu se dirige hacia la paz y serenidad, que vivo en el sentido de mi ser, que realizo quién soy yo. Tengo únicamente que practicar cada día unas cualidades positivas y sentiré una felicidad que me colme, estaré bien no solamente en mi piel pero también en mi conciencia y mi corazón.
Leer : ¿Es posible vivir feliz? (1)
Leer: ¿Es posible vivir feliz? (3)
Extracto de la Colección Voluntarios de Dios: “Es posible vivir feliz”. P. Louis-Marie Parent, o.m.i.