¿Qué significan todos estos años de mi vida oblata en el Instituto Las Oblatas Misioneras de María Inmaculada?
Mi vida cristiana se vivió en mi hogar, por el conocimiento y la vida en J.D.C. Mi consejero y pastor, Monseñor Fernando Aristía me hizo conocer al Instituto. Eso fue una magnifica respuesta de Dios a mis anhelos de entrega, de búsqueda de la santidad, de servicios a los demás. He podido mostrar al Señor cuánto lo quiero imitando a María Santísima.
Conocí también un apoyo, una solidaridad permanente en todo momento de mi vida, que sean tristes o alegres. He vivido cariño, grandes y verdaderas amistades.
Experimenté crecimiento y madurez en la fe y en mi desarrollo personal. Por eso trato de dar lo mejor de mí al Instituto en las responsabilidades que me pide.
El espíritu y la enseñanza de nuestro fundador me fue muy inspirante porque el Padre Parent se dejaba guiar por el Espíritu Santo. Ofrezco al Señor un canto de agradecimiento, gozoso y alegre a Dios por todos estos años de gracia y de fidelidad del Señor hacia mí.
Ana A., Chile